jueves, 18 de febrero de 2010

Extremadura hace Europa. Javier Solana, premio Carlos V


Desde que me enteré de la reunión del jurado del Premio Carlos V andaba pensando quién podía ser la persona que recibiera tan importante galardón. Importante, sí, quizás junto con el Carlomagno el más relevante de los premios que se entregan en Europa para quienes han protagonizado, de una u otra forma, la construcción o reinvención de un continente como el nuestro.

Europa, marcado por unas guerras mundiales, por los halos imperialistas de antaño y acuciado por una unidad que poco a poco trasciende lo meramente económico para ir construyendo capítulos que se sustentan en lo social.

En 1992 se crea la Fundación Academia Europea de Yuste, una institución respetada que tiene su sede en el Monasterio y que recibe su nombre de quien es considerado un primigenio europeísta y que escogió La Vera, como es sabido, para morir.

Desde entonces personajes ilustres como Gorbachov, Delors, Kohl, Felipe González o Simone Veil han sido merecedores de un galardón que acerca Extremadura a Europa de la misma forma que rehabilita a sus protagonistas. Significativa fue en su momento la designación de Helmut Kohl que, tras verse salpicado por casos de corrupción en Alemania, vio cómo su prestigio era restituido, entre otras cuestiones, gracias a este premio.

Lógico fue la palabra que pronuncié cuando ayer leí que Javier Solana era la persona escogida. Inmejorable elección en unas fechas donde se necesitan referentes y donde en un mundo global una persona como Javier Solana tiene mucho que decir todavía y ha sido protagonista en muchos capítulos de nuestra democracia. Fue el único ministro socialista que formó parte de todos los gabinetes de Felipe González. Posiblemente su encomienda como Secretario General de la OTAN le privó de alcanzar otras metas. Y su vinculación con Extremadura, más allá de otros capítulos, es importante en la medida en que, ahora que estamos inmersos en un proyecto europeo como Cáceres 2016, él era ministro de Cultura cuando se produjo la declaración de Cáceres como Patrimonio de la Humanidad.

Seguimos, por tanto, haciendo Europa, aportando nuestro grano de arena para que el continente siga reconociendo las figuras capitales de nuestra historia reciente. El reconocimiento expreso del Comité de las Regiones donde recientemente se ha nombrado a Guillermo Fernández Vara jefe de la delegación española es una prueba más que atestigua nuestro peso en Europa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Menuda patraña, ¿Has leído el libro la CIA en España? Pues a ver si te informas un poco y eres menos sectario...en fin.