XXV Aniversario del Consejo de la Juventud de Extremadura

Hoy 24 de enero cumple veinticinco años el Consejo de la Juventud. Un cuarto de siglo desde que con motivo del Año Internacional de la Juventud de 1985 muchas autonomías y muchos colectivos entendieran que el camino para fortalecer a la juventud pasaba ineludiblemente por crear estructuras asociativas que contaran con el amparo de la administración. De entonces ahora no pocas han sido las vicisitudes por las que el tejido asociativo extremeño ha pasado. Conozco bien el Consejo de la Juventud. Formé parte durante tres años de su Comisión Ejecutiva. Lo hice desde el voluntariado, formando en mi asociación juvenil de siempre, los Amigos de Francisco de Asís, continué aprendiendo y aportando en los últimos años del siglo pasado. Aquella fue una etapa apasionante, de enormes satisfacciones y que siempre recordaré, quizás porque por motivos laborales tuve que desvincularme muy pronto de un lugar donde me sentía cómodo y sobre todo válido.

Viví en el Consejo muchas sensaciones. La de buscarnos un hueco en la administración, la de ser rebeldes frente a las estructuras, la de construir grandes proyectos, la de empezar a conocer por dentro los vericuetos de la burocracia. Pero todo eso estaba construido y alimentado por las personas que por entonces andábamos allí. Todo eso y más. Anécdotas y papeles. Muchos de los cuales todavía guardo con mimo. Se me vienen a la cabeza mucha gente, muchas situaciones. Pero queda tiempo este año para recordarlas. Había comentado con un amigo que en este post hablaría de él. Lo dejo para más adelante, que se quede con las ganas.

Hoy mirar a los que están es recordarse uno mismo. Poder colaborar puntualmente, aunque sea desde otro ámbito, siempre será un placer. Sigue quedando, como entonces, el reto de que sea -seamos- un organismo capaz de ser reconocido por los propios jóvenes. Aunque más allá de eso, siempre será encomiable el trabajo que se realice desde, por y con el mundo asociativo, el que desde el voluntariado promueve los valores y el compromiso ciudadano.

Enhorabuena