Extremadura, en lo más alto

La normalización hoy es de Extremadura como región, que cuenta con tres extremeños entre los nominados a los Goya (Bebe, Alberto Amarilla y Reyes Abades), que ha visto cómo España entera estaba en vilo con la lesión de José Manuel Calderón, que ve cómo el segundo grupo productor de vigas de acero de Europa es de nuestra región, que tiene al ceramista Lorenzo Pérez Vinagre entre los finalistas del Premio Nacional de Artesanía, que exportará el modelo de sociedad de la información a Malasia o que ve cómo se recompensa a Chema Caballero, misionero javeriano con el Premio Brunet 2.006.

Todo esto no es la memoria de las realizaciones extremeñas en los últimos años, como maliciosamente piensan algunos. Esto es el resultado de haber pensado en nuestra región como una comunidad emprendedora, versátil (pues hay logros en cultura, en deporte, en cooperación, en tecnología...) y sobre todo abierta al mundo y no encerrada en sí misma. Lo mejor es que esto han sido logros de la última semana, prueba de que si hay alguna región revelación y que sorprenda es la nuestra. Esto son los frutos del trabajo silencioso y humilde de los extremeños.

Sólo queda que lo digamos bien alto y bien fuerte, que se nos escuche en Malasia. Estamos en lo más alto. Y sí, desde Extremadura, para que nadie se sorprenda.