"yo no apruebo este estatuto"

Con este personalismo obsceno se ha despachado el del blog en sepia, Monago, para chantajear los trabajos que se han estado haciendo de reforma del Estatuto. Lo hicieron con la televisión durante años y parece que siguen teniendo el mismo collar, parafraseando el dicho.

Estoy seguro de que muchos militantes, simpatizantes o votantes del PP, ante esta afrenta, se habrán sentido engañados, como seguro que también muchos se sintieron así cuando de manera individual cambió la postura sobre la refinería y otras tantas y tantas cuestiones.

Está haciendo política maquillada pero que se sustenta en la soberbia. Una política que le hipotecará para los restos si no cambia de estrategia de inmediato. Demasiado crédito ha tenido a la hora de que se le haya considerado para todas las cuestiones fundamentales de nuestro desarrollo.

Y tras muchas deslealtades, suma a esta actitud la de la arrogancia en nuestra norma marco fundamental, como es la del Estatuto. Así no se hace oposición