Olimpiadas de primavera

Hasta ahora le debíamos a Coubertain la recuperación de los Juegos Olímpicos (sé que los de verano, entiendo que indirectamente también los de invierno) y resultaba complicado preparar otros. De momento, a internet le debemos unas curiosas olimpiadas de primavera: la de superar el record de botellón. Será complicado saber el origen de la iniciativa, pero lo que está claro es que habrá que buscarla en algún colegio mayor o residencia con gran diversidad juvenil en su procedencia.

No obstante, sea como fuere, el leitmotiv es sinónimo de nuestra desnudez de hoy día. Si ya de por sí somos heterogéneos, muy acertadamente en un editorial aparece en A Vuela Pluma de esta semana. Realmente no existen nexos de unión muy fuertes, ni identidades que nos sustenten como jóvenes.

Por eso nos hemos creado dos grandes estilos de vida. El vivir de manera responsable, o como buenamente pueda cada uno, y nuestro personal young life style: o cómo vivir para el fin de semana y no morir en el intento.

En todo esto surgen las competiciones de la primavera. Pon un record en tu vida. Antes el idealista debía plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo (o algo así). Ahora la naturaleza se ve en los campos de fútbol del Pro Evolution Soccer y de escribir ni hablamos. El ideal es beber alcohol y competir por ello, parece ser

Si Coubertain levantara la cabeza...