El molino de la Ribera del Marco

Al final lo público le ha dado caza. Tras años persiguiéndolo, lo que pudo ser una intervención de Alba Plata al final se ha convertido en una infraestructura anhelada por muchos y sobre todo que hacía falta en la ciudad. Espacio para la creación joven. Una infraestructura nominada por muchos. La duda es si su filosofía y otras intervenciones es conocida por todos, con los cada vez más conformistas medios de comunicación convencionales a la cabeza. No será la panacea para los músicos, y menos para aquellos músicos adultos que dejaron ya hace años de ser jóvenes. La distribución final de los espacios habrá que discutirla, pero lo que es seguro es que el proyecto de rehabilitación y su resultado final lo colocarán a la cabeza de otras intervenciones similares. Se ha conseguido algo que antes no se logró. Ha bastado una alcaldesa como Carmen y una directora general como Leire para hablar del esfuerzo común y para representar los intereses de la ciudad. Larga vida al espacio que ayer empezó a gestarse.