Los turroneros, señora

Como habrán podido comprobar mis lectores, opto por un título más o menos literario en cada acto, evento, sarao, mitin... o como se quiera llamar al que voy. Vengo de Santibáñez el Alto, un pueblo que pese a la proximidad con Descargamaría no había visitado nunca. Poco lo he hecho hoy. Apenas hora y media de luz nocturna además, que poco más que te deja intuir las vistas y sobre todo darte casi de bruces con el Borbollón. Siempre recordaré las diapositivas que de este pantano me ponían en el Aula de Naturaleza de Descargamaría, cuando existía (hoy convertidas en las aulas de los niños del pueblo) o cómo las vistas desde la Almenara de Cadalso, uno de mis lugares favoritos para hacer marchas en campamento, son imponentes.

Y el título tiene que ver a la pura realidad. Podremos ser turroneros o feriantes o tener una particular barraca de generar opinión en nuestras mentes que va allí donde puede y le apetece (como es mi caso) o donde le toca (como es el asunto de la mayoría). Los turroneros hoy se han parado en muchos sitios. Los turroneros jóvenes, que son de quienes sé, han estado en Tornavacas, caso de Leire, en Pescueza, Rubén, en Casas del Castañar y Cabrero, el casi diputado Carlos y en Santibáñez donde han coincidido Jorge y Esther. Han asistido de media aproximadamente unas 30 personas, en entornos eminentemente rurales, de valles o sierras, tanto monta monta tanto, insertos en nuestro modelo de desarrollo que día a día crece a la par que debe irse oxigenando.

Las personas son agradecidas como pocas y cuando menos tienen más lo son. Nos dan su compañía y nos prestan su atención. Con sus miradas, con sus aplausos, con sus preguntas y con sus ganas de que ganemos las elecciones. Hoy he presenciado exclusivamente a los asistentes al acto. De todos se podía aprender algo. De quien fue emigrante, de quien daba la razón a cuenta de las dificultades para ser político, de quien veía el futuro más negro...

Hoy se ha terminado un nuevo acto de los turroneros, pero mañana continúa la función de la opinión y de la democracia. Plasencia o Mohedas de Granadilla son algunos de los sitios. Por la noche toca Navalmoral, un concierto y después otro en Aldeacentenera. Habrá que hacer la crónica mañana. Abrazos y besos