Virginidad (bandejil) en el Mercado Medieval

Fue anoche, en el Mercado Medieval, que por cierto felicidades por el éxito que tiene (algo percibido no solo por nosotros sino por los comentarios). Espectaculares, aunque una pena que anden atados, las rapaces de la Plaza del Archivo de Moctezuma. Pues bien, casi al finalizar el horario sucedió...allí estaba. No lo había hecho antes. No tenía miedo, ni tampoco me producía respeto, pero hay que decidirse. De todas maneras no sé si lo volveré a hacer. Me gustó por la compañía. Anoche fue un trío. Lo hicimos Cristina, mi hermana y yo. Según me adentraba en sus dominios, ásperos, me daba cuenta de que tampoco es algo traumático. La primera vez. Y aquí sigo. No sé si habrá una segunda, y si en esa segunda será un trío también o iré en pareja, o incluso será una cuestión onanista por mi parte. Pero desde luego ayer lo hice. Quienes me conocen saben que no lo había hecho antes. Ni se lo recomiendo a nadie ni se lo dejo de recomendar. La experiencia ahí queda. Mis pies no huyeron, sobre todo porque aún siguen recibiendo órdenes correctas del cerebro. Aunque seguro que si hablaran me hubieran dado el toque. Yo les hubiera dicho que tampoco es para tanto, aunque la verdad seguiré evitándola cada vez que pueda. Anoche, por tanto, sí, perdí mi virginidad con la bandejina de la Plaza. Anoche, en el mercado medieval de 2007 lo hice por primera vez. La pisé. Y aquí siguen mis pies.