viernes, 22 de junio de 2007

Nuevo obispo en Cáceres

Tras el buen sabor de boca -patrones obsoletos de la iglesia mediante- que el anterior obispo de la diócesis dejó en Cáceres, no solo en lo que a la iglesia se refiere, sino en el conjunto de la sociedad, ha llegado un nuevo obispo, Francisco Cerro, que pese a ser cacereño estaba en Valladolid. En su contra, que quizás no haya visto la evolución de la sociedad cacereña en estos años. A su favor, las expectativas que se crean, el saluda del que hoy dan cuenta los periódicos regionales y su trayectoria en la pastoral juvenil. Si adapta el lenguaje, si cambia algunas cuestiones anquilosadas, si hay un acercamiento a la juventud, posiblemente los jóvenes que voluntariamente lo deseen propiciarán un acercamiento a la iglesia. Sin embargo, apostar por lo de siempre será caer en buenos deseos, buenas voluntades y palabras vacías. A pesar de todo, o por eso mismo, bienvenido a Cáceres.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Para Monseñor Francisco Cerro, los jóvenes son su medio vital, entre quienes se encuentra como pez el agua. Coordinadora de jóvenes, Pastora juvenil, Fraternidad del Sagrado Corazón...
Yo le voy a apoyar con mi oración. Soy extremeña y me alegro un montón de que se quede en nuestra tierra.