lunes, 28 de enero de 2008

Diccionario SMS


Algún día tenía que llegar esta iniciativa. El problema es que surge en un momento en el que muchos quizás nos ocultemos bajo el parapeto de un teclado de móvil o de ordenador para tapar nuestras vergüenzas y nuestras carencias en lo que a la redacción y a la expresión se refiere. Ese diccionario es una herramienta un tanto peligrosa en función de quien la utilice. Puede ser un arma de destrucción masiva de la lengua si tiene calado, o puede ser la consecuencia de la destrucción masiva si es que los móviles no la han destrozado ya. No estoy en contra de los "tk", de "hl k tl?" ni de cuestiones parecidas. La raíz del tema es que aquello de la RAE de fija, limpia y da esplendor ha dado paso a una especie de barra libre incontrolable, pero a la par esencial. Y me enfado y me rechinan los dientes porque consintamos todos (y no es achacable a nadie y sí a todos) la perversión de nuestra lengua a través de los messenger o de los móviles sobre todo. Aquel género chat, aquel libro que hoy tengo prestado, es una bomba de relojería. No es negativo si lo utiliza alguien que sepa hacerlo. El problema es que termina siendo masivamente utilizado por quienes aún no distinguen una baca de una vaca. Y así, suma y sigue.

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