Reflexiones sobre los atentados de Capbreton

A diferencia de la mayoría de los bloggers, tertulianos de medio o entero pelo, políticos o politicastros, no me he referido a los terribles atentados de ETA antes, esperando a ver cómo se desencadenaban acontecimientos y también para hacer un acopio suficiente de información.

Han sido dos jóvenes, pertenecientes a un grupo de operaciones de la guardia civil de riesgo (todos sus compañeros llevaban ocultas las caras en televisión cuando portaban los féretros). Quizás excesivamente jóvenes para una misión de tanta importancia (apenas eran cadetes) No lo planteo en clave inexperiencia sino en clave edad.

Ha sido en Francia, y han sido dos españoles en Francia. Por la cabeza de todos pasaron tiempos anteriores. Sin embargo, la cooperación entre ambos gobiernos, que Rodríguez Galindo y Rafael Vera, junto con otros -como Julio Feo- relatan en sus libros, es ejemplar. Como delito en Francia, deberían ser juzgados allí. Esa es la lógica. Y si son juzgados allí, serían condenados, previsiblemente a cadena perpetua. ¿No servirá esa hipótesis que planteo para reabrir un debate en España de endurecimiento de penas? ¿Si se reabriera el debate, quién lo abrirá, el poder judicial, el oportunismo político, la presión mediática...?

Ha sido un atentado inusual perpetrado por tres personas, dos de las cuales ya han sido detenidas (aquella presunción de inocencia ha desaparecido frente a lo hipócria que queda en otros hechos quizás más evidentes como en casos de violencia machista). Dicen que la tercera persona que falta tiene el suficiente rango en la organización como para haber autorizado el atentado. Si fuera así, creo que ya se habría dicho quién era la tercera persona. Pero podría ser. Si no fuera así, que también podría ser, se demostraría la desesperación de unos terroristas política y judicialmente acorralados. En ambos casos, estimo, podría aplicarse esta última hipótesis.

Ha sido un modus operandi extraño. El coche fue registrado previamente. El operativo en el que estaban los dos guardias civiales era de gran calado. Demasiadas casualidades para que se encontraran en la misma cafetería. Conocemos las historias de Lobo, otras que se relatan en el libro Objetivo Cero, de infiltraciones en ETA. Quiero no pensarlo. ¿Pero alguien está explorando lo contrario por rarezas fundadas de este caso?

Ha sido un atentado esclarecedor. ANV está a un paso de la ilegalización. Hay prudencia en este tema en el gobierno porque no hay anuncios ni declaraciones estridentes. Llevamos, tras la detención de los 42 de Ekin, unos días de cierta calma. Antes de final de año debería iniciarse el proceso de ilegalización, con hechos fundados y fundamentados, emanados de la falta de condena, ahora sí, de un atentado, con todo el peso de la ley en la mano.

Ha sido un atentado que ha producido unidad. Queda todavía mucho camino y los gestos son de gran importancia. Pero hay que evitar declaraciones inoportunas, y la oposición debe estar en un segundo plano de acompañamiento y de solidaridad absoluta, sin las estridcencias a las que nos tienen acostumbrado.